Con una propuesta profundamente emotiva, el diseñador venezolano Raenrra presentó su esperada colección “Flor de Lis 2025” Quinta La Esmeralda, en Caracas. El desfile rindió homenaje a su madre, Berta, figura central de esta colección que fusionó elegancia, nostalgia y una profunda narrativa visual.

El evento congregó a personalidades del mundo de la moda, medios, arte y entretenimiento, quienes fueron testigos de una pasarela que trascendió las tendencias para convertirse en una experiencia sensorial cargada de significado.
Una colección con alma: así fue “Flor de Lis 2025”
Cada pieza de la colección evocó la conexión íntima del diseñador con su madre, musa eterna de esta entrega. Raenrra apostó por una paleta de colores sobria y poderosa, donde el negro reinó como símbolo de eternidad, acompañado por el mocca, que representó las raíces y memorias, y el vino tinto, que expresó el poder de las emociones maduras.
Las siluetas, estructuradas y etéreas a la vez, fueron bordadas con detalles que contaban historias: flores, lágrimas, símbolos y texturas que recordaban la fuerza femenina y el poder de la resiliencia.
Una velada que reunió a la élite creativa de Caracas
La atmósfera de Quinta La Esmeralda fue clave para elevar la experiencia. La iluminación tenue y la musicalización cuidadosamente curada crearon el entorno perfecto para una pasarela íntima y conmovedora. Sonaron versiones orquestales de Alma Llanera, clásicos italianos y una emotiva serenata guayanesa que conectaron con las raíces del diseñador. Raenrra, orgullosamente llanero, quiso rendir tributo a su tierra y a su madre a través de cada nota, haciendo de cada salida un acto poético cargado de identidad.
Entre los asistentes destacaron figuras del diseño, la moda, el entretenimiento y la cultura venezolana, quienes aplaudieron de pie una propuesta que no solo reafirma a Raenrra como uno de los grandes de la moda nacional, sino también como un narrador emocional a través del vestuario.
Raenrra 2025: más que moda, un manifiesto
“Flor de Lis 2025” no es solo una colección, es una carta de amor a una madre, una meditación visual sobre la pérdida, la fuerza interior y la belleza que permanece. Con esta entrega, Raenrra ratifica su compromiso con la moda con identidad y sentimiento.